Se agrava la situación en la Policía Local de Plasencia

La situación que vive la Policía Local en Plasencia sigue agravándose día tras día. Tras los públicos rechazos al uso de segway:
Nuevo rechazo a los 'segway'
la última noticia que conocemos es la denuncia por parte de la llamada “Comisión de Policía Local” del uso particular de un coche oficial por parte del Intendente-Jefe.

La Policía denuncia el uso del coche oficial por el intendente

En la Policía Local de Plasencia se vienen sucediendo determinados hechos que van agravando cada vez más las relaciones entre la plantilla, la Jefatura y los responsables políticos.

Sin querer entrar a fondo en el asunto y simplemente a modo de información para los que desconozcan los datos principales comentaré que, aparte de los numerosos problemas cotidianos que todos podemos tener en nuestras Jefaturas, todo comienza a adquirir matiz de conflicto a raíz de diversos hechos diferentes:

En primer lugar, existían problemas de uniformidad y antiguas reclamaciones económicas no solucionadas.

En segundo lugar, se creó una Policía de Barrio mal planteada, en cuanto que fueron asignados a ella de forma obligatoria agentes recién entrados, con menores retribuciones por hacer turnos diferentes e imponiendo además patrullas unipersonales. Todo ello sin una negociación previa, sin la creación de estos puestos en la RPT y sin formas objetivas de provisión de puestos de trabajo.

Por otro lado, se han abierto varios expedientes disciplinarios que han acentuado el malestar Se asignaron servicios de noche a agentes el día anterior a sus vacaciones, y mientras a juicio de la Jefatura debían prestar servicio el turno completo, ellos opinaban que a partir de las 00:00 estaban en su periodo vacacional y no prestaron servicio.

A los que estamos en otras localidades nos llama la atención y sorprenden los problemas existentes y la situación creada, pues Plasencia no ha dejado nunca de ser un referente para muchos.

Personalmente apoyo totalmente a los nuevos agentes en sus reclamaciones y quejas acerca de la forma en que han sido obligados a prestar sus servicios; rechazo evidentemente las patrullas unipersonales; y afirmo, al igual que ellos, que debería existir una previa creación de los puestos, una negociación sobre formas de provisión y sobre sus retribuciones. (Me consta que en el proyecto inicial el servicio estaba previsto como voluntario y con mayores retribuciones pero que fue modificado por los responsables políticos). Por lo que creo que debería presentarse la correspondiente demanda judicial y así lo he aconsejado a quien me ha pedido opinión y así lo he transmitido al Intendente-Jefe de la Policía Local.

Apoyo también las reclamaciones económicas que se estaban planteando.

Pero no puedo apoyar ni creo que deban apoyarse otro tipo de manifestaciones. NO TODO VALE en la acción sindical.

Sobre los segway no me parece el camino manifestar que es ilegal su uso. Porque no es cierto, y porque las verdades a medias desprestigian otras reivindicaciones que puedan efectuarse y en las que se tenga plena razón. El segway puede utilizarse en las zonas peatonales y aceras, aunque evidentemente no por la calzada. Es un instrumento muy útil para la labor de patrullaje, porque se visualiza enseguida al agente, lo que incrementa los beneficios de su presencia en la vía, por su capacidad de maniobra y por la velocidad que puede darnos si fuera necesario. La prueba es que es utilizado por numerosas policías locales fuera de nuestra comunidad. Diferente asunto sería el plantear si es adecuado o no para Plasencia por las características de la ciudad, o si hay gastos más prioritarios que afrontar, pero no es lo que se plantea.

Sobre las declaraciones sobre el Intendente-Jefe, debo decir que son indignantes, totalmente rechazables y que únicamente buscan el desprestigio profesional y personal de una excelente persona y un excelente policía,  que no solo se ha preocupado de atender a su localidad, sino que ha ocupado un papel destacado en la formación de los policías locales y ha colaborado con numerosas propuestas a la mejora de la normativa de la policía local a nivel regional. Son unas acusaciones muy graves, de las que no creo que se sea plenamente consciente, pues, de no demostrarse, pueden llegar a suponer un delito de injurias y calumnias hacia un funcionario público.

Es cierto que en la vida política estamos acostumbrados a oír este tipo de declaraciones públicas que no deberían tener justificación si no van acompañadas de la correspondiente sentencia judicial o por lo menos de alguna prueba y denuncia ante Fiscalía. Pero en ningún caso las hagamos en contra de quien no deja de ser otro policía, con la diferencia de que en este caso ejerce la responsabilidad de una Jefatura, porque tengamos opiniones enfrentada. Seguramente existen otros argumentos que poder defender y otros temas que plantear ante la opinión pública.